Después del avance de la semana pasada, en la que fabricamos nuestros primeros metros de filamento, nos dimos cuenta que las botellas se procesan muy rápido. Los trabajadores aprendían a la velocidad de la luz, y las botellas, que eran muchas en un principio, volaban de una zona a otra para convertirse (desde residuos) a escamas que podían ser extruidas en forma de filamento.
Cuando todo indicaba que nos quedábamos sin materia prima… y cuando la lluvia paró el suministro… aparecieron ellos.
Se preguntarán quiénes son el Equipo A, pues les explicamos:
En Casa Central hay tres hombres que se han sumado desde el principio al proyecto y, desde el Centro de Operaciones de la Casa Familiar Manolo Torras, han organizado un sistema de recolección de botellas entre los trabajadores y las estancias del hogar. También han colocado un contenedor amarillo en el jardín y han fomentado el reciclaje entre todas las personas que por allí pasan. Por supuesto, informan al resto de compañeros y compañeras de la cantidad que han recolectado. Una vez el trabajo de recolección se ha completado, llevan ellos mismos toda la materia prima a la fábrica.
Pues bien, hoy han rescatado la producción. Su esfuerzo y profesionalidad, pese a la lluvia, ha permitido que no se frene la producción de escamas. Por eso son nuestro Equipo A, porque cuando tenemos problemas, no dudamos en llamarles.
Gracias, Javier, Moisés y Jonathan.
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